sábado, 12 de setembro de 2009

LA VICTORIA TIENE UN PRECIO ELEVADO Y TRISTE... LA ALEGRÍA TOTAL, POR ESO, ES PATRIMONIO DE LAS GENERACIONES FUTURAS

Lo que nosotros hicimos se correspondió a una posición ÉTICA y de valores de vida muy positivos que nos llevaron a adoptar una actitud ante la vida y los hechos que en el tiempo nos correspondieron.
En general, en el mundo se vivió en esos tiempos todo un movimiento de jóvenes reclamando a los adultos y a sus respectivas sociedades cambios en las mismas para dar paso a un mundo que nosotros creíamos podíamos hacer y ser mejor.
Recordemos el hipismo (movimiento hippie), las protestas por Vietnam, el mayo francés y la masacre de Tlatelolco en México en el ´68... En fin, nos tocó vivir una época inolvidable y envidiable para cualquier generación de jóvenes.
Muy poco queda o estamos dejando para la posteridad en torno a las razones personales y/o colectivas que nos llevaron a tomar esas decisiones de vida que, eventualmente (todos lo supimos en su momento) eran también decisiones de muerte; en aras de algo que queríamos alcanzar ya no tanto para nosotros sino que para otros (Nunca se me ha olvidado aquella frase, que creo que es de Carlos Fonseca o de uno de nuestros mártires de la Revolución, en la que comenta sobre el precio de la Victoria... Y no se me olvida porque realmente ESE PRECIO LO PAGAMOS... ya sea con algo físico nuestro: heridas, etc, o con algo emocional: la pérdida de amigos entrañables, hermanos de lucha...
La frase creo que viene así:
LA VICTORIA TIENE UN PRECIO ELEVADO Y TRISTE... LA ALEGRÍA TOTAL, POR ESO, ES PATRIMONIO DE LAS GENERACIONES FUTURAS)
Y ese precio, o lo que nos llevó a estar dispuestos a pagar ese precio y, porque no decirlo también, cobrárselo a otros (el enemigo somocista, en este caso) no es conocido y/o reconocido por las actuales generaciones de jóvenes en Nicaragua... Ni siquiera, me atrevería a decir, por aquellos que son más cercanos a nosotros: nuestros hijos, nietos, sobrinos, etc.
Solamente hay en ellos la memoria de lo que podríamos llamar los errores y fallos que la construcción de una realidad distinta, por el mero hecho de ya ser una nueva y desconocida realidad, puede provocar. Y hoy por hoy, donde quiera que llegamos percibimos casi que como que fue malo casi todo lo que se pudo hacer, y nunca nada en torno a las altas aspiraciones que teníamos esa generación de jóvenes.
Una vez comenté con Ronal Estribo (jejeje) sobre que Freddy (el chino) y yo queríamos hacer una memoria colectiva sobre todos nosotros.... Y poner en blanco y negro todos esos sentimientos, motivaciones, etc. que nos llevaron a hacer lo que hicimos.. Y él me comentó (muy acertadamente) que consideráramos que talvez algunos de nosotros no quisiésemos aparecer en ningún tipo de memoria de esa clase, porque -lo cual sabemos que también tiene algo de verdad- después del ´90 muchos de nosotros inclusive tuvimos que "reescribir" nuestra historia, para poder ser sujetos de empleo, etc.
En ese momento sentí en toda su fuerza el tamaño de nuestra derrota -no sé si parcial, momentánea o qué se yo, pero derrota al fin- que nos podía llevar inclusive a OCULTAR NUESTRA VERDADERA ESENCIA, LO QUE NOS LLEVÓ POR EL SENDERO DE LA HISTORIA QUE JUNTOS DECIDIMOS RECORRER!!!
Es decir, me resisto a creer y aceptar que los sectores sociales que nos adversaron en su momento nos hayan inflingido una derrota de proporciones tales que hasta tengamos que renegar públicamente (aunque no en la intimidad de nuestros círculos) de nuestro pasado, de nosotros mismos!!!
También se que lo anterior no lo hemos vivido todos, pero hay algunos de nosotros que si lo hemos tenido que vivir. Creo que por unos y por otros, deberíamos asumir el rescate de nuestra memoria histórica...
Eventualmente, es lo más valioso que podemos heredar a nuestros descendientes: Nuestro honor, nuestra actitud ante la vida, la verguenza ante el error cometido, la rabia ante la injusticia, la energía y decisión en las luchas que te plantea la vida a cada momento, la intransigencia y necedad en la defensa de lo que nosotros consideramos son nuestros derechos...Eso precisamente es lo que hizo de nosotros mujeres y hombres, jóvenes todos, de nuestro tiempo y en nuestro tiempo; consecuentes con la realidad y las problemas que la humanidad, nuestra sociedad, debía resolver en ese momento.
Esa palabrita...CONSECUENTES!!!..... tantas veces la repetimos, la creímos, la difundimos... Y la hicimos realidad...
Porqué, entonces, no podemos pensar que una evolución natural de esa ACTITUD CONSECUENTE que nos marcó para siempre en nuestras vidas es precisamente, legar una memoria de eso que fuimos y que hicimos para que las generaciones que nos siguieron tuvieran oportunidades distintas -mejores- a las que tuvimos nosotros????
Por lo menos a mí me gusta la idea de poder decirle a mis hijos o mis nietos: mirá, ese joven que estudia/juega/comparte con Vos...su padre/madre/abuelo, tuvo un pasado, una vida, de gloria y de combate... Y por eso es que tanto Vos como él pueden ser/hacer lo que sus progenitores no pudieron: El chaparro Sergio, El dubi, Ulises, Douglas mejía, chico meza, el hermano menor de Fernando Caldera, Saúl Alvarez, el tritón (así le decían, verdad??), el hermano menor de Dean Dixon, Robelo... Y cuantos otros cuya memoria aún podemos honrar no solamente no olvidándolos sino también diciendo sobre las razones que a ellos -y a nosotros- los llevaron por ese camino.


Creo que el hombre, la mujer, que olvidan sus memorias, terminarán preguntándose si alguna vez fue cierta su historia.... Y, por consecuencia, acabarán aceptando la versión que otros le ofrezcan sobre los hechos que él mismo vivió o construyó...




Con el cariño y el amor de un hermano....
H.M

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